Dura derrota del senior masculino contra el último clasificado. Tiempo de reflexión. Confianza guerreros!

Entrevista con Sun Tzu, el gran estratega del siglo I antes de cristo sobre el rendimiento majariego en la Batalla del Cuartillo.

1.Un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después.
Desde hace muchas semanas el sentido común hacía ver la importancia de “la batalla del cuartillo” por ser Cáceres un rival con mismos objetivos que los nuestros, y a priori, más débil por ser el último clasificado de la Nacional. Por lo que resulta de la percepción de los últimos entrenamientos tenía pinta que los jugadores no lo habían interiorizado. Como quedó patente, no valía simplemente con ir a luchar en la explanada cacereña como exitosamente el equipo de Lucho ha ido demostrando esta temporada en distintos campos. La cuestión, -o más bien el problema-, es que el guerrero majariego va a la batalla en todos los partidos de la misma forma. Aunque si bien tiene una buena y desarrollada virtud impulsiva e irascible de buen guerrero (además de un carácter épico destacable bien representado por su Capitán), el orden de la guerra y de nuestros objetivos exige impepinablemente algo más que esa virtud. Hay carencia de una perspectiva general estratégica que los guerreros puedan asimilar. El orgullo épico de alcanzar la victoria y el máximo rendimiento en cada momento nos hace olvidar el fin de la batalla general. Y en una guerra, hay batallas de contención, y hay otras, en las que hay que conquistar posiciones claves sea como sea. Eso exige preparar a las tropas correspondientemente para cada momento, orientando y reservando la mayor potencialidad posible en determinados momentos en los que no se debe fallar. Y esta, era una de las batallas más importantes de la temporada. Batalla a resaltar y a tener en amarillo fosforescente en el calendario.

2.Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas.

Mientras que los planteamientos estratégicos pertenecen a los Generales Entrenadores, los Guerreros jugadores en el campo de batalla deberían tener herramientas tácticas variables para poder tomar decisiones ante el planteamiento rival, el clima, la relación fuerzas, etc…. Esta es sin duda la gran deficiencia del juego majariego que desespera a los entrenadores en distintas categorías (exclúyase aquí a la generación Infantil del CRM con altas capacidades a tomar como referencia). Frente a la gran falacia de la necesidad de tener un juego definido al que deban doblegarse disciplinadamente los jugadores de todo el club, debe imponerse en seguida el desarrollo inteligente del análisis inmediato del rival. Hoy por hoy, debería ser la única forma de juego a imponer más allá de formas y códigos compartidos. Una capacidad que permitiría tener jugadores que supieran llevar ritmos de juego, evaluar relaciones de fuerza superiores, saber manejar lógicas de concentración-desconcentración de jugadores en el espacio, o incluso determinar cuándo y porqué jugar rápido o lento, además de un sinfín de cosas que pertenecen al orden de la toma de decisión táctica. Entonces, ¿tienen razón los entrenadores en su exigencia y desesperación? -Sí. ¿Se está entrenando a las tropas para mejorar esta exigencia? -Tengo dudas. ¿Puede entrenarse esta habilidad? -Pues claro, pero soy escéptico ante el camino escogido donde el predominio del entrenamiento físico aislado del juego y del largo tiempo que se desempeñan en movimiento estratégicos, ocupan al final más del 90 por ciento de cada entrenamiento. Ojo, no quiere decir que no sea importante preparar al guerrero físicamente, en el arte de la espada, y en un cierto mecanicismo que le permita mejorar, pero la realidad, es que no sirve ser fuertes y rápidos y seguros, si no sabemos correr en las direcciones más ventajosas en el momento que hay que hacerlo.
Sería como tener una fuerza y una espada tremenda y golpearla contra el aire o contra un muro. En cualquier caso,si se pretendiera esta mejora, mal encaminados vamos por la falta de confianza que se le da al jugador en nuestro club con tantísimo grito de correción, o con las limitaciones en la creación de un juego más libre. Factor que resulta clave para el avance del juego a través de la experimentación y del error.

3.Hay que comparar cuidadosamente el ejército opositor con el propio para saber dónde la fuerza es superabundante y dónde deficiente.

Evaluar al equipo contrario en relación constante con el nuestro nos va a permitir solucionar varios rompecabezas con los que nos encontramos el otro día. Cuando seguir avanzando, cuando desplazar, cuando penetrar… Es el arte de la táctica y toma de decisión, algo que no se reflejará en estadísticas, pero clave para la evolución del juego futuro majariego. La primera respuesta de nuestro juego la tenemos en frente. Levantad la cabeza y analizad.